Las oposiciones de fisioterapia son una oportunidad para obtener una plaza fija en el sector público y ejercer la profesión con estabilidad laboral y buenos beneficios. Sin embargo, también es una prueba exigente y competitiva que requiere una preparación rigurosa y una actitud resiliente para hacer frente a la competencia.

A continuación, te presentamos algunas claves para afrontar la competencia en las oposiciones de fisioterapia y aumentar tus posibilidades de éxito:

1. Conoce el perfil del opositor ideal: Antes de iniciar tu preparación, infórmate sobre las características que suelen valorar los tribunales en los aspirantes a fisioterapeuta del sector público. Esto incluye conocimientos teóricos, habilidades prácticas, actitudes éticas y aptitudes personales como la capacidad de trabajo en equipo, la flexibilidad y la resolución de problemas. Una vez que tengas claro el perfil del opositor ideal, podrás orientar tu estudio y tu formación hacia esas competencias.
2. Investiga las convocatorias anteriores: Es importante conocer las convocatorias anteriores de las oposiciones de fisioterapia para tener una idea de los criterios de evaluación, el temario, la estructura de las pruebas y las posibles sorpresas que puedan surgir en el proceso selectivo. También puedes consultar las estadísticas de aprobados y las notas de corte para hacerte una idea de tu posición respecto a los demás aspirantes.
3. Amplía tus recursos de estudio: Además de los temarios oficiales y los libros de referencia, es recomendable que busques otras fuentes de información y aprendizaje, como cursos online, congresos, jornadas profesionales, revistas especializadas, etc. Cuanto más amplio y variado sea tu bagaje, más fácil te resultará integrar los conocimientos y adaptarte a las diferentes preguntas que te puedan hacer en las pruebas.
4. Entrena con simulacros de examen: Para acostumbrarte al ritmo y la tensión de las pruebas, es conveniente que hagas simulacros de examen en condiciones similares a las de la oposición (tiempo limitado, preguntas tipo test, etc.). De este modo, podrás detectar tus puntos débiles, afinar tu estrategia de respuesta y mejorar tu capacidad de concentración y gestión del tiempo.
5. Trabaja en equipo: Aunque las oposiciones son una prueba individual, también es importante contar con un grupo de apoyo y colaboración que te ayude a resolver dudas, compartir recursos y motivarte en los momentos de desánimo. Puedes buscar compañeros de estudio en foros, grupos de redes sociales o clases presenciales, y planificar sesiones de trabajo conjunto para repasar temas específicos o hacer simulacros de examen.
6. Cuida tu bienestar emocional: La competencia en las oposiciones puede generar estrés, ansiedad, miedo al fracaso y otros sentimientos negativos que pueden afectar tu rendimiento y tu salud. Por ello, es fundamental que cuides tu bienestar emocional y físico, mediante técnicas de relajación, ejercicio físico, una alimentación equilibrada, un buen descanso y una actitud positiva ante los desafíos.